










Mi querida Karin,
Estoy pensando mucho en ti y en el día que estallamos en la playa, con la arena entre nuestros pies y la marea golpeándonos. Es un recuerdo que siempre me hace sonreír. Quiero que te sientas tan especial como eres, por eso te pido que hagas fotos de ese día, para recordarlos juntos.
También estoy emocionado de saber que estás en camino hacia Nueva York. Me encanta sorprenderme cada día de que tienes a mi lado, y espero que puedas hacer lo mismo aquí. Te amo más con cada día que pasa.